Tengo que dormir

El blog está sufriendo cambios. Cambios de estructuración o destructibles, reconstruibles, incinerables, transformables e inexplicables, pero finalmente, espero, reconfortantes.
Como lo he dicho anteriormente, hay una pequeña banda sonora en mi cabeza. Hay veces en que no sé que decirle a la gente y recomiendo canciones o disco, muy pocas veces videos, pero siempre por ahí, ya saben, "música".
Si tuviera que elegir en este momento una banda sonora, un sonido especial o algo en particular, tendría que hablar de dos canciones. La primera la obviaré y la mantendré en secreto (suelo revelar mis escondites sin querer y después enojarme porque han sido descubiertos, este no será el caso), pero la segunda... La segunda canción he de compartirla con ustedes.
Les cuento con la esperanza de que entiendan lo que quiero decir, pero en realidad sé que no lo entienden asi que, en el fondo lo escribo porque después lo voy a releer y le voy a encontrar tanto sentido que será, como dije, reconfortante.
Este canción dura 9 minutos. Vocalmente es tan difícil de reproducir, que Tori Amos la ha cantado completa solo una vez en vivo. El video está en youtube, pero no voy a darles una lata de 10 minutos solo por capricho. Asi que les dejo este video, que si bien es un trailer a la canción misma (porque dura 5 minutos), está bien filmado y alcanza a retratar la esencia pseudo melancólica o quizás muy bien encaminada, de la angustia de la princesa Anastasia, que no sabe quién es.
(quiero borrar la última frase pero me quedó tan bien chamullada que la dejaré aqui)
La canción se llama Yes, Anastasia y la pueden encontrar al final del segundo disco de Tori, llamado Under the Pink.
Dudas y consultas al mail.
Yo, me voy.



Si no quieren mamarse el video completo, dejen que se cargue y luego véanlo desde los 3 minutos y hasta el final.
¿La letra? Una de las mejores.